martes, 28 de febrero de 2012

Amibiasis en Pediatría

La amibiasis intestinal de acuerdo a la definición porpuesta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es la infección causada sólo por el parásito Entamoeba histolytica, cuyo hábitat es el intestino grueso.

Se reportan por año alrededor de 500 millones de personas infectadas en todo el mundo de los cuáles solo el 10% presentan síntomas clínicos.

Existe una especie amibiana NO PATÓGENA (Entamoeba dispar) cuya forma en quiste es prácticamente indistinguible de la forma patógena (Entamoeba histolytica), lo cual tiene numerosas implicaciones médicas en el uso indiscriminado de antiparasitarios.

Existen 2 formas de presentación de la Entamoeba histolytica: El Trofozoíto, es el que produce la enfermedad, y el Quiste, que es la forma infectante. La detección de quistes en las heces no es indicativa de presencia de enfermedad. 

Existe una gran diferencia entre el número de infectados y el porcentaje relativamente bajo de pacientes que desarrollan amibiasis invasiva, esto es, por un gran número de pacientes que presentan colonización por cepas no patógenas o la mala identificación de quistes.

La vía de transmisión es fecal-oral, es decir por ingesta de quistes a través de las manos,  alimentos y agua  contaminados con heces infectadas con quistes. También se transmite por contacto sexual.  Una vez que se ingiere el quiste, su cubierta se reblandece  en el intestino delgado, para producir ocho trofozoítos que migran hacia el intestino grueso donde si las condiciones son propicias invaden la mucosa intestinal.


Cuadro Clínico
El cuadro clínico se caracteriza por presentar  evacuaciones pequeñas y numerosas, con moco, sangre y poco contenido fecal. El paciente tiene dolor abdominal, pujos y sensación de plenitud rectal.

En el intestino, los trofozoítos  pueden llegar a formar úlceras y complicarse por una perforación.


Diagnóstico
El diagnóstico se establece mediante la de los trofozoitos  en heces recién evacuadas, en ocasiones son necesarias hasta 3 muestras para la detección.


Tratamiento
Si el paciente no tiene datos clínicos y existen quistes de E.histolytica, no debe administrarse tratamiento.

En caso de detectarse trofozoitos en heces es necesario el tratamiento antiparasitario adecuado para la eliminación de la Entamoeba histolytica, además de un adecuado plan de rehidratación.